A veces necesitamos memorizamos cifras o fechas que luego olvidamos con facilidad. Nuestra curva del olvido destruirá lo aprendido antes de lo que imaginamos. Pero existen reglas nemotécnicas que nos ayudan a hacer más sencillo el recordar lo aprendido. De seguro que recordamos una fecha o un lugar, cuando esta va asociada a un suceso importante para nosotros. Pues bien esto mismo podemos aplicarlo a la hora de aprender fechas, lugares o nombres de personas.

Otro modo de aprender es asociar la materia a un esquema que nos ayude a recordarlo de forma ordenada. Lo primero es crear una lista de conceptos que tengan un nexo común. Es lo que se utiliza en la técnica de brainstorming o tormenta de ideas. Tal y como dice su definición: “Práctica de una persona o equipo para resolver un problema o generar nuevas ideas que ayuden a resolverlo”. Una herramienta más que nos ayuda a abordar la resolución de un problema. Algunas técnicas agile lo utilizan con diversas variantes, pero no deja de ser un coctel de opiniones que nos lleva a tomar una perspectiva diferente del como abordar un problema. Existen multitud de manuales sobre esta técnica tan utilizada en la educación o los negocios.

En mi caso utilizo brainstorming para crear una lista conjunta. Con el resultado trataremos de pintar un esquema, fácil de memorizar para todos. Fechas y nombres se vuelven inmortales asociándolo a un esquema, una imagen, o quizás una breve historia. En mi caso lo utilizo con mis hijos, ayudándome de fotografías y dibujos. Lo que para ellos puede resultar un juego, finalmente es una forma de aprender.