• Mi Vespa

    Vespa 125N. Instalación eléctrica.

    La instalación electrica de nuestra vespa, nos permite distribuir la tensión necesaria desde el motor para alimentar las luces del faro, pilotos y claxón.

    Basicamente la tensión parte desde el motor que genera tensión de alterna a 6 voltios para las luces y el piloto. Así como alimenta la bobina de alta (figura 10) que permite la descarga a la bujia (figura 4).

    Este es el esquema electrico para la llave de luces FEMSA original de la época. En el podemos observar tres lamparas, una de ellas para la luz larga y de cruce (figura 7), la luz de población (figura 6) y el piloto trasero (figura 3).

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  • Mi Tiempo

    Vespa 125N. Vaciado del motor.

    Tal y como se describe en el libro “Manual de la Vespa” de 1954, el desmontaje o vaciado del motor ha de hacerse con sumo cuidado y procurando no deteriorar o dañar las piezas que contiene. Estas suelen ser de acero para rodamientos, engranajes y ejes. Así como aluminio para el carter, piston y cangrejo del cambio.

    Para proceder a la reparación del motor, lo primero e indispensable es desprender las carcasas de refrigeración, limpiarlo con gasolina y secarlo al aire, para eliminar restos de grasa y barro que suelen adherirse al mismo dada su próximidad con el suelo.

    Una vez limpio y sobre un soporte adecuado procederemos a retirar el silencioso y la toma de admisión que conecta al carburador. Tras ello y previo a liberar las tres tuercas que fijan la culata, retiraremos esta y el cilindro, con cuidado de no dañar el piston y la biela.

    Observaremos el estado de la culata y el pistón al que probablemente tendremos que limpiar de carboncilla y sustituir los aros o segmentos que permiten la compresión. Para liberar el pistón retiraremos los circlips de su alojamiento con ayuda de un alicate de punta y extraeremos el bulón.

    Desmontando el volante magnético

    Para soltar el volante magnetico aflojaremos la tuerca central previo a retirar el clip que la encierra. Una vez desmontado usaremos un extrartor para liberar el volante. Siempre debemos de cuidar no dañar ni extraviar la chaveta a modo de media luna que encaja en el eje. Una vez fuera de su alojamiento el volante, comprobaremos el correcto funcionamiento de los platinos y las bobinas que proporcionan la corriente electrica a nuestra vespa.

    Desmontando el conjunto embrague

    El embrague de la vespa esta alojado en el lateral izquierdo de nuestra vespa al cuál accederemos retirando los tres tornillos que fijan su tapa, esta irá provista de una junta tórica para evitar la salida del aceite que desprende el engrase y de un respiradero superior para la salida de los gases que se liberan en su interior.

  • Mi Gastronomia

    Leche Frita

    La leche frita es un dulce tipicamente de cuaresma, junto con pestiños y torrijas endulzan estas fiestas en las que el azahar y el incienso inundan nuestras calles. El origen de esta especie de empanadilla es arabe y se atribuye a estos su aderezo a base de de azucar y canela.

    Ingredientes:

    • 1 litro de leche
    • 120 gr de harina fina de maiz (Maizena)
    • 200 gr de azucar
    • Canela en rama
    • Vainilla fresca en hebras
    • Corteza de un limón
    • 2 huevos frescos
    • Azucar glass
    • Canela en polvo
    • Harina de reposteria para rebozar

    Preparación

    Ponemos a calentar sin dejar que hierva aproximadamente 3/4 litro de la leche con la vainilla, una rama de canela, la corteza del limón y los 200 gr de azucar. El resto de la leche la utilizaremos en frio para disolver la harina de maiz, procurando que no se formen grumos.

    Una vez que tenemos nuestra leche caliente y aromatizada, retiramos la canela, la vainilla y el limón. Así como verteremos sobre esta y poco a poco el resto donde hemos disuelto la harina de maiz. El proceso consiste en ir moviendo suavemente y siempre en el mismo sentido ayudado de un cucharon o paleta. Observaremos que nuestra leche espesa y va tomando cuerpo. Transcurridos unos 10 minutos aproximadamente nos resultará una espece de pure blanco y dulce.

    Vertemos la masa sobre un molde, preferentemente amplio y de poca altura, para que nos resulte más comodo cortarlo. Tras ello colocamos nuestro preparado en el frigorífico durante un par de horas. El resultado es un pastel consistente y muy homogeneo que podremos cortar en porciones.

    Desmoldaremos nuestra base sobre una tabla o superficie amplia, para cortarla en pequeñas porciones de un tamaño aproximado al de media pastilla de jabón.

    Tras ello rebozaremos los trozos pasandolos primero por huevo y después por harina de repostería. Los freiremos en aceite de girasol bién caliente y los dejaremos enfriar sobre papel absorvente.

    Por último y una vez frios, los introduciremos en una liga de azucar y canela. Espolvorearemos por encima con azucar glas y listo.